30 septiembre 2011

La Comunicación a través del silencio

La importancia de reflexionar antes de hablar

Los Comunicadores tenemos un problema recurrente: queremos hablar todo el tiempo, pero no por ello lo debemos hacer siempre. Nuestra rutina nos exige detenernos a reflexionar si lo que pensamos necesariamente tenemos que decirlo. 

 "El silencio es el primer paso para acoger la palabra, precisamente porque favorece el discernimiento y la profundización"

Recibimos a diario información en cantidades industriales y mucha de ella irrelevante. A propósito de este asunto, el Papa Benedicto XVI ha presentado el tema de la 46° Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales, referido al "Silencio y la Palabra"; una tesis importante para no hablar por hablar.

Por ejemplo, ayer la revista Caretas tuvo una avalancha de críticas al publicar en su revista semanal una fotografía de Walter Oyarce - hincha del equipo Alianza Lima muerto hace una semana luego del clásico del fútbol peruano - ensangrentado en la camilla mientras era trasladado a la ambulancia. La pregunta: ¿era necesario colocar esa foto de la víctima? A veces, cuando un medio quiere generar polémica o conseguir atención, en muchos casos, hace lo que sea por conseguirlo. 

¿Y dónde entra el silencio en este asunto? Lo responde muy bien el Papa: "El silencio es el primer paso para acoger la palabra, precisamente porque favorece el discernimiento y la profundización". Los comunicadores tenemos la responsabilidad de transmitir información correcta y ordenada, no por impulsos o sentimientos que, a pesar de la aceptación, estén vacíos y sin sentido.

El silencio no es antagónico a la comunicación, es - incluso - complementario para que ésta se lleve a cabo de manera profesional y objetiva. Frente a la sobreabundancia de estímulos existentes, el silencio se podría convertir en un valor necesario para la profesión periodística y el actuar del comunicador. 

Si el periodista, investigador o editor de Caretas hubiera usado ese silencio para reflexionar y discernir la importancia de colocar esa imagen o lo adecuado o no depublicarla, tal vez la historia sería otra. 

El silencio no es malo aunque mucha gente huye de él. Tiene aspectos positivos y necesarios para la comunicación y que se deben buscar en bien de la labor comunicativa. Una frase interesante es: "Habla cuando quieras, pero quiere cuando debas". 



1 comentario:

Male dijo...

Muy buen artículo!! Pienso que es una valiosa reflexión, especialmente para los que trabajan con información... Ojalá muchos lo acojan y les ayude a transformar esa horrible tendencia a manipular todo con tal de captar más atención.