12 septiembre 2011

¿Debo creer en el horóscopo?

Las falsedades de una no-ciencia

Desde hace tiempo veo la necesidad de escribir sobre este tema tan controversial y supersticioso. El horóscopo, el tarot, la hoja de coca y otras maneras de "predecir" el futuro son una moda que atrae a muchos interesados y - por qué no - incautos. 

Si sabemos un poco de ciencia, ésta se basa en analizar hechos concretos, plantear hipótesis y a partir de los ensayos y pruebas determinar la realidad o no de la tesis propuesta. Dicho esto, podríamos deducir que éstas técnicas de adivinación son absurdas para el método científico ya que parten del azar y libre interpretación de quien realiza el acto. 

Les presento algunas apreciaciones comunicativas que he encontrado en el horóscopo y que creo se repite en muchas otras 'artes' adivinatorias:

1. El signo zodiacal: 
Desde que nací sé que soy de signo cáncer y las veces que he leído sobre la personalidad de quien tiene ese signo me doy cuenta que en muchas descripciones habla de mí, y que en el resto definitivamente no soy yo. Obviamente, si me lanzo a decir características muy variables y diversas, en algunas tengo que acertar ¿no?.
Además, en qué momento la alineación de unos planetas determina la personalidad de la persona ¿qué hay de ciencia en este tema? Si creemos esto, podríamos asegurar que la educación de los padres y el entorno en que crían a sus hijos no tendría absolutamente nada que ver, ya que los planetas han "decidido" cómo será esa persona.
Por otro lado, se pone en juego el "quién soy" a la interpretación de quienes "entienden" el cosmos y la carta astral. Siguiendo con este ejemplo, solo existirían 12 (o 13 porque ya han inventado un nuevo signo zodiacal) tipos de personalidades, definidas por el zodiaco. 

2. El practicante de horóscopo:
He escuchado varias veces, y de distintas personas, que en muchos diarios el encargado de redactar el horóscopo es el practicante de periodismo. ¡Oh no! ¿todo lo que yo creía leer en el periódico lo escribió un alumno universitario? Sí, puede ser que, en algunos casos, sí y nunca se dieron cuenta porque la información que dan, si estamos atentos, no necesita de mucha ciencia o inteligencia. Basta con preguntar a algunas personas qué les está pasando, qué les preocupa y qué necesitan y me pongo a escribir.

"Se hacen incapaces de determinar el rumbo de sus vidas porque creen más en los astros y energías antes que en su inteligencia, actitud y voluntad por hacer de su vida algo mejor"

3. La generalidad de las sugerencias:
Al preparar este artículo revisé varios horóscopos para analizar las sugerencias que ponen en cada signo. Todos podríamos hacer ese ejercicio y darnos cuenta que cualquier signo bien podría serle útil a cualquier persona. Es decir, ponen cosas tan generales que a alguien debe haberle acertado la predicción. ¿Quién no tiene problemas económicos, necesidades laborales, busca pareja, etc? 
Y claro, como muchos habremos escuchado alguna vez, cuando el signo no me dice nada: "Mmm... esta vez el signo no es para mí! ¿Han probado ver su signo en distintos diarios? Inténtenlo...

4. Jugar con necesidades:
En el fondo, los únicos afectados en creer en el horóscopo son quienes creen en él a capa y espada, porque hacen de su vida una dependencia del azar y la suerte. Se hacen incapaces de determinar el rumbo de sus vidas porque creen más en los astros y energías antes que en su inteligencia, actitud y voluntad por hacer de su vida algo mejor. 
Me sorprendió una "predicción" que decía lo siguiente: "Prepárate para hacer cambios que mejoren tu vida. Lograrás ganancias financieras, pero tienes que dejar algo a cambio. Piensa en qué puedes dejar de lado y pon eso en el mercado". Me da risa y lástima porque: 1) no sabe la astróloga a quién le está hablando, no conoce su realidad ni situación, sin embargo, le pide arriesgar dinero o bienes invirtiéndolos en el mercado o en un negocio; 2) las personas que creen firmemente, lamentablemente, muchas veces cumplen lo que dice el horóscopo. No me quisiera imaginar una familia que invierta su dinero cuando objetivamente no era lo que necesitaban.

Podríamos entender entonces que el creer en la astrología, adivinación, etc. es realmente un absurdo, ya que no brinda elementos tangibles y concretos que me indiquen qué hacer para mi vida. Vuelven a la persona incapaz de asumir su vida con responsabilidad, y dependiente de lo que la suerte le diga. 



4 comentarios:

José O. dijo...

creo que también muchos lo asumen como un juego, un vamos a ver qué me dice, especialmente las mujeres (uy, ahora me cae palo por machista)... quizás hay cierta expectativa en el misterio, cierta necesidad de algo trascendente detrás de todo esto...

Rodrigo Chávarri D. dijo...

Hola José,
Es cierto, a muchas personas les conmueve o sobrepasa el pensar en el futuro porque es algo desconocido, y es por eso que buscan seguridades que, subjetiva e ilógicamente, les den respuestas, como los métodos de adivinación.
En el fondo, buscan "algo" que les dé respuestas. Respuestas que al final todos buscamos de una manera u otra. En este caso, el horóscopo es una respuesta falsa.

Carlos dijo...

Un datito:

Nadie se "inventó" un décimo tercer signo. El signo Ofiuco existió siempre, ya que los signos se basan en las constelaciones que se observaron en un momento de la historia, pero a la hora de armar el horóscopo decidieron dejarlo de lado porque era más bonito (supongo que hay razones más supersticiosas aún en esto) tener 12 signos que tener 13.

Definitivamente no creo en el horóscopo pero desde un punto de vista anímico a veces puede hacer que una persona se sienta mejor consigo misma, tal vez como un placebo, ya que la mayoría de cosas que propone el horóscopo del diario que leemos siempre son cosas positivas.

Y, obviamente el horóscopo es un insulto contra la personalidad y las diferencias individuales, ya que pensar que la posición de los astros y el día que naciste te hace ser quien eres desdice todo lo que las ciencia en general nos ha enseñado del ser humano.

Excelente blog, saludos!

Rodrigo Chávarri D. dijo...

Hola Carlos,
Tienes razón! Cierto que no se lo inventaron, sino que lo incluyeron recién en este año. Partiendo de eso, ya no soy cáncer sino géminis entonces ¿mi personalidad ya cambió?
Sí, podría ser más como unas "pastillas para levantar la moral" aunque en el caso de la astróloga que invitaba a invertir en la bolsa, bien jalado de los pelos.
Muchas gracias por tu comentario!